El tren salió desde Barcelona a las 9,45 am. Nos esperaban unas 4 horas de recorrido en el AVE. Tranquilos, relajados y a 300 km/hs y sin notar ni el movimiento ni la velocidad, llegamos a Sevilla en pleno Jueves Santo.- La gente local camina por las calles luciendo sus mejores galas. Los hombres de traje y corbata y las mujeres con vestidos de gala, algunas de ellas con vestidos negros, peinetas y mantillas mostrando el duelo. Muchos se preparan para la Madrugá en donde las Cofradías o Hermandades, que llegan a 3.000 personas algunas, salen de las distintas iglesias e inician un recorrido que les llevará unas 12 hs.- Al paso de la Virgen se escucha los aplausos, las saetas que cantan desde la ventana, los gritos y las lágrimas. Es muy emocionante. Los Nazarenos caminan delante del Paso de Cristo y del Palio de la Virgen, que son esas grandes estructuras que tienen unos 5 mts de alto, 8 de largo y que pueden pesar unos 2.000 o 3.000 kgs cargados por una cuadrill
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